Sirio: Estás triste.
Yo: Tal vez, maestro. Pensaba en que Pablo, hace 4 años, fue revolcado por una ola, y me pareció terrible. Era casi un bebé entonces. Pero hoy, ese mismo niño estuvo brincando olas, y siendo revolcado, y ya no me pareció terrible, sino que fue algo normal... va creciendo rápido.
Sirio: Va creciedo rápido y tú sientes que la vida junto a él se te va acabando ¿verdad? sientes que te quedan pocos años de ir de su mano.
Yo: Sí.
Sirio: Eso es porque miras la vida sólo en una dirección. En algún momento, te dijeron que lo que va a pasar, eso que está en el futuro, es lo que podrás disfrutar.
Yo: pero justo es así ¿no?
Sirio: Sí. Pero ¿por qué darle menos valor a lo que ya pasó, eso que está en el pasado, y que ya pudiste disfrutar? Son simétricos. Son igual de valiosos. Son tuyos, los dos.
Me levanté y me fui a comer. La comida estuvo muy rica.